Cada vez va quedando menos para nuestra partida de vuelta a España, y ya hemos dado nuestro primer “adiós”, o más bien, nuestro primer “hasta pronto”. Tras estas últimas semanas en la escuela de Fátima, Asunción, hemos tenido la oportunidad de trasladarnos unos días a la famosísima Escuela Internado San Isidro Labrador de La Salle, en Pozo Colorado, del cual no habíamos escuchado más que MARAVILLAS, y que en la próxima entrada os podremos contar a través de nuestras vivencias.



Los distintos grados y clases nos prepararon manualidades varias, pequeños y grandes recordatorios para no olvidarlos en el tiempo que estuviésemos fuera, pero pese a lo que creían, ¡volvíamos! Tan sólo nos marchamos por unos días. Aun así, los dibujos y las dedicatorias llegaron, haciendo que Sara estuviese a “un dibujo de llorar”, sin embargo, aguantó, pues fueron todo más risas y sonrisas que lágrimas.


Tras las semanas que llevamos acá es imposible no ir tomando cariño a los niños, que en cada receso, rato libre, merienda o en la hora de educación física aprovechan para acompañarnos en nuestras tareas, y para hacernos mil y una preguntas acerca de nosotros, de dónde venimos, qué nos gusta hacer… Es un auténtico placer poder compartir con ellos estos ratos, y sin duda son uno de los mejores del día: increíble la mente de los más pequeños y las preguntas y cosas que te dicen.




HASTA PRONTO, abrazos.
Sara, Martín y Sara